Mentiras verdaderas : La insoportable levedad de los funcionarios

Nos llega la noticia, a través del diario zonal “Actualidad”, que el Municipio ha intimado a dos barrios cerrados, a realizar obras de desagües pluviales para evitar las importantes inundaciones que han vivido algunos vecinos de Rincón de Milberg en los últimos tiempos o exponerse a los costos en el caso que deba encararlas la gestión actual.
Al parecer, Los barrios cerrados El Atardecer y La Laguna, descargan su excedente de aguas pluviales a una zanja, por una compuerta que los vecinos han descubierto y filmado y que anegó las calles Estanislao del Campo, Güemes, Callao y Williams, llegando el agua a un metro dentro de algunas casas.
Caben algunas preguntas al respecto:
Quienes aprobaron los planos de los citados barrios privados sin controlar cuales eran las descargas pluviales y a que red se acoplaban?
En la anterior gestión, se aprobaron decenas de barrios cerrados sin hacer un estudio ambiental ni de las redes de servicios necesarias para dichas construcciones, motivando además el terraplenamiento de vastos sectores, como el valle de inundación natural de la Ruta 27, que servían de fuelle para las crecidas.
Los responsables de verificar esto han tenido continuidad entre la pasada gestión y la actual.
Cuál es el Plan Urbano-Ambiental de Grandoni tras más de dos años en la gestión ?
Es un funcionario que también participó en ambas gestiones.
Jamás escuchó los argumentos de las Asambleas en cuanto al deterioro Urbano y Ambiental, por lo tanto no consensuó con la población sobre que cursos de acción desarrollar para los distintos problemas que nos sobrepasan hace años, antes que eso las combatió fervientemente.
Cómo accedió a semejante posición en la administración actual sin contar con la aptitudes y actitudes pertinentes?
Tal vez 11000 votos aportados pueden más que poseer ciertas virtudes.
Es realmente ofensivo a los ciudadanos de Tigre que este señor intime a las urbanizaciones privadas, cuando desde siempre, nunca se pensaron las redes de servicios ni se les dieron reglas claras para cumplir en sus emprendimientos, lo cual tampoco los libera de la responsabilidad de inundar a sus vecinos.
El precio del m2 construido, prevaleció siempre sobre como se incluían estos nuevos lugares en la estructura de una geografía tan especial como la del Delta, porque de esa forma los negocios florecían y la recaudación fiscal (llámese caja política y nunca redistribución de recursos) se engrosaba en forma impensada.
Moraleja:”Zapatero a tus zapatos” o tal vez más pueblerinamente: zapatillero a tus alpargatas.
Los temas urbano-ambientales siguen sin ser incluidos en la agenda política de nuestro lugar en el mundo, el HCD en general (por motivos varios de público conocimiento) permanece en silencio ante semejante omisión, a pesar de los reclamos de participación constante de los distintos actores sociales.
El agua al cuello nunca permitió pensar acertadamente, tal vez haya que planificar con anticipación aunque se toquen intereses poderosos y rentables, pero claro, eso sería tarea de gente responsable, eficiente y participativa.
En síntesis nuestra obligación es seguir insistiendo cada vez más firmemente, exigiendo la participación que nos corresponde.
Al fin y al cabo, es nuestro lugar en el mundo.

Hornero del Sur